Maruja, 90 años y locutora. ¡La radio no tiene edad!

Maruja tiene 90 años, 2 hijos, 5 nietos y 5 bisniestos.
Maruja, a sus 90 años, es posiblemente la locutora más veterana de la radio española.

Maruja tiene 90 años, dos hijos, cinco nietos y cinco bisnietos. Le gusta quedarse dormida escuchando la radio “porque en la televisión tienes que andar pendiente de los cuadros”. Y elige también este medio para escuchar música “porque en la televisión los cantantes hacen gestos raros” y no le gusta verlos. Maruja y un grupo de unas veinte personas me han hecho en Betanzos (A Coruña) una entrevista maravillosa. Nos hemos reído y emocionado. Era el último día de un taller de radio para mayores ideado por Sergio Pascual y Lucía Abarrategui, dos jóvenes periodistas tan enamorados de la radio que han creado un laboratorio: laboratorioderadio.com

sergioylucia

-Sergio y Lucía, ¿cómo surgió la idea de crear un laboratorio de radio?
 Cuando acabamos la formación oficial, tras buscar un trabajo que ni existía ni iba a llegar, decidimos crear Laboratorio de Radio. Nuestra vocación por la radio hizo que este proyecto surgiera fruto de una necesidad: devolver el micrófono al oyente, participante pasivo de la radio y que ahora, gracias a esta iniciativa, es el verdadero protagonista del medio. Queríamos transmitir nuestros conocimientos pero sobre todo nuestro amor por este medio, y por ello decidimos llevar la radio ” a cualquier rincón, a cualquier persona”, como reza nuestro lema fundacional, y convertir así esta experiencia en un trabajo. A partir de ahí, fue un largo peregrinar presentando el proyecto a mucha gente (habremos tenido más de 1.000 reuniones) desde 2013. Nuestra primera experiencia fue en diciembre de 2013, en un pueblo de Valladolid llamado Gallegos de Hornija. Tras el éxito de la actividad probamos suerte en Galicia y tras muchas reuniones, comenzamos con el Club Radiofónico de Lectura y Escritura (proyecto en activo: http://clubradiofonicodelecturayescritura.blogspot.com.es/) y los talleres de Betanzos y de Coirós. Además pudimos dar cursos en el Centro de Formación de Profesores sobre la dinamización de las bibliotecas escolares a través de la radio. Entre los servicios que ofrecemos está además de los talleres de radio para niños y mayores, cursos para mejorar las capacidades comunicativas de cara a entrevistas de trabajo, presentaciones, proyectos, etc. Además, estamos inmersos en un proyecto de crear marcas radiofónicas, impartimos cursos de radio para extranjeros en la USC para que aprendan español de una forma amena y divertida.

Estamos presentes en el CPI Virxe da Cela desde hace más de un año, formando parte de la actividad curricular del centro a través de sesiones quincenales en el que buscamos a través de la radio, potenciar las habilidades comunicativas, de redacción, de lectura o de mejora de capacidades comunicativas de los alumnos entre otras cuestiones.

-Especializarse en radio, ¿es una buena opción para periodistas jóvenes?
 La especialización es la opción, siguiendo claramente la estela del periodismo americano que ya no busca un periodista “de tertulia” que en un período de 15 minutos hable tanto de Libia como del paro pasando por la crisis en Génova y concluyendo su exposición sobre cómo se fabrica una botella de plástico. Ese periodismo ya no sirve. Ahora debes manejar un campo o una especialidad y convertirte en el mejor. Si no te especializas, corres el riego de saber de todas un poco pero de no controlar verdaderamente ningún campo en concreto, lo que será un handicap para la empresa periodística a la hora de contrarte (si es que alguna conjuga ese verbo).
-La radio como medio terapéutico, para niños y mayores. ¿Qué aporta la radio a las personas que participan en vuestros talleres?

La radio es una herramienta inagotable de la cual cada día descubrimos un don nuevo. Respecto a los niños, la radio es un elemento diferente que permite aprender divirtiéndote ya que gracias a ella, no solo experimentas lo que resulta de hablar frente a un micrófono sino que también aprendes a escuchar, a trabajar en equipo, a preguntar, a leer mejor, a plantarle cara al miedo de hablar en público, a redactar mejor y saber sintetizar un texto, algo que no solo le cuesta a los más pequeños sino a todos. La radio es una ventana que permite abordar cualquier materia desde una perspectiva que implica más al alumno y activa su creatividad en un medio en el que la imaginación es el motor y las ganas las ruedas.
Respecto a los mayores y siendo todas las características comunes en ambos colectivos, nos encontramos con la creación a través de la radio, de un punto de encuentro entre amigos, para entretenerse, para disfrutar, dialogar, dejar los problemas en la puerte, integrarse en un grupo que con el tiempo son la familia de la radio, reir, aprender, conocer a gente nueva. A este concepto lo llamamos “rejuvenecimiento activo”, por que es volver a ser un poco más joven gracias a los demás y motivados por las propias ganas que cada participante aporta a la actividad. Son los protagonistas de la actividad y aprenden en ella, no solo qué es un indicativo o una cuña, sino cómo echar un cable a un compañero que titubea a la hora de presentarse, o qué hacer para que un compañero que no sabe leer tenga el mismo protagonismo e importancia que el resto del grupo. Mejora de la autoestima, confianza, felicidad,etc. Una actividad que además ha salido del aula con actividades como la I y II Velada de Radioteatro Amateur en Betanzos y la actuación en Sada, que permitió darle alas a la actividad, llevando a sus integrantes por otros entornos pero reafirmando la idea de grupo consolidado que son y al que nosotros enseñamos pero del que mucho aprendemos y nos enriquecemos.

Una anécdota que resume esta actividad es que participantes de 80-90 años, cuando actúan en estos actos cara al público, nos cuentan que no esperaban a su edad recuperar los nervios para actuar, o la sensación de impaciencia para que llegara el día que tenemos actividad. Nervios buenos y mejores sentimientos de gente que se come la vida a mordiscos y que no nos deja de maravillar con cada bocada de amabilidad, fuerza y también cariño.
En el laboratorio de radio, con un grupo de personas maravilloso
En el laboratorio de radio, con un grupo de personas maravilloso.
Foto de grupo. ¡Qué bien me lo he pasado y cuánto he aprendido de todos ellos!
Foto de grupo. ¡Qué bien me lo he pasado y cuánto he aprendido de todos ellos!